*A continuación publico esta Carta Abierta de algun@s ex
trabajador@s de la Agencia La Vaca que acaba de llegarme por email:*
*A comienzo de este año, la Cooperativa de Trabajo Lavaca Ltda.,
responsable de la publicación de MU, un periódico mensual; el libro Sin
Patrón, una guía de fábricas y empresas recuperadas y El fin del
periodismo y otras buenas noticias, decidió abrir un espacio de
encuentro en donde poder generar ingresos con un bar y en donde además
se daría espacio a muchos colectivos, artesanos, putas, vendedores
ambulantes y asociaciones que realizan productos dentro de instituciones
como el Instituto José T. Borda y Tobar García.
Lavaca significaba, para los que hacemos esta carta, un espacio donde la
construcción de pensamiento y de trabajo se basaba en la horizontalidad,
el respeto y el reconocimiento al otro como par. La ilusión cuando
abrimos MU. Punto de Encuentro era tener un lugar que genere un
"encuentro", donde confluyan todas aquellas experiencias con las que
trabajamos desde un primer momento y que dieron sentido a la creación de
la cooperativa; creímos en un espacio donde convivan distintas
experiencias, distintas manifestaciones culturales, donde pudiésemos
humanizar los productos de los colectivos que veian cerrado todo tipo de
canal para su difusión, un espacio que nos permitiese hacernos visibles,
que nos permitiera además vivir dignamente... Hoy, seis meses después de
la inauguración del espacio, que queda en Hipólito Yrigoyen 1440, los
integrantes de la cooperativa, que sostienen el espacio, decidimos
presentar nuestra renuncia después de los reiterados maltratos que
recibimos de parte de una de las fundadoras de la cooperativa: Claudia
Acuña. Desde el momento que abrimos el espacio, fuimos víctimas de la
violencia verbal y de las humillaciones de esa persona, que pasó desde
gritos injustificados hasta un exhaustivo control de nuestra vida
privada/personal. Hoy, viernes 7 de noviembre de 2008 decimos basta a la
violencia ejercida por esta persona, decimos basta de control sobre
nuestras vidas, decimos basta a la mentira, manipulación y a las
contradicciones, porque no queremos ser más cómplices de ellas.
Las contradicciones de las que hablamos tienen un ejemplo concreto
(aunque podrían ser citados muchos otros): un miembro del periódico
realizó una entrevista con un reconocido cineasta y militante, para el
número de noviembre. Días después subió el audio en crudo a un programa
de radio que él conduce que se emite semanalmente por internet.
Misteriosamente, la editora de un periódico cuyo lema es noticias
antycopyright, libre circulación de la información, se enfureció. Llamó
y habló con distintos miembros del grupo a los gritos, agrediéndonos y
diciendo que el periodista "no era nadie", que gracias a su nombre había
conseguido el reportaje, y que subir la nota representaba un acto digno
de un "caradura". Por si fuera poco se metió con su familia, y le dijo
vía mail al periodista que no iba a publicar el artículo y que "se lo
metiera en el culo".
Ninguno de nosotros estaba vinculado a este proyecto por el dinero.
Empezamos ganando 400 pesos por trabajar, a veces, hasta 13 horas
diarias, no sólo atendiendo mesas, lavando baños y platos, sino también
resolviendo problemas administrativos que la cooperativa trae de
arrastre desde que fue fundada en 2001; organizando eventos como ciclos
de poesía, recitales y fiestas que nos ayuden a pagar el alquiler y
nuestros sueldos. Cada mes, gracias a nuestro esfuerzo, pudimos
incrementar los jornales mes a mes y llegar a ganar hoy la descomunal
suma de 700 pesos mensuales. Sin embargo en el día de la fecha, esta
persona se comunicó para decirnos que teníamos que cobrar menos,
aduciendo como justificación "la recesión económica". Ese es otro de los
tantos motivos que nos hacen tomar esta decisión, aunque queremos dejar
bien claro que la causa principal no es la económica, sino el maltrato
antes citado. Valga como prueba de ello que en el espacio queda todo
intacto, sin que ninguno de los renunciantes se lleve absolutamente
nada, ni reclamando el aporte económico realizado al inicio del proyecto.
Nosotros nos vamos, pero todos los que sigan yendo tienen que saber que
ahí no se está gestando nada nuevo como esta persona quiere hacer creer.
Los más antiguos modos/rasgos patronales están siendo ejercidos hasta
hoy -con nuestra actitud pasiva, lo sabemos y reconocemos, aunque
motivadas por temor a ciertas represalias-, pero ya no más. Decimos
basta y vamos a llevar esta Carta Abierta a donde sea necesario, para
que esto no pase nunca más.
Agradecemos el apoyo recibido hasta ahora (y a partir de ahora), y a
todos los que nos están acompañando en este momento tan difícil para
nosotros. *
Los abajo firmantes (por orden alfabético):
Gonzalo Beladrich, Ana Belén Díaz, Quimey Lillo, Pablo Nicolás Montiel,
Sonia Sánchez.
7 de noviembre de 2008
http://argentina.indymedia.org/news/2008/11/636894.php