[Infopalestina.mx] Sionismo y apartheid: dos palabras para u…

Supprimer ce message

Répondre à ce message
Auteur: fazio
Date:  
À: Noticias y actividades sobre la lucha del pueblo palestino
Sujet: [Infopalestina.mx] Sionismo y apartheid: dos palabras para un mismo significado

http://www.hispantv.com/noticias/oriente-medio/336037/sionismo-israel-apartheid-palestina


Una nueva derrota de la política sionista en Palestina y de la
protección del gobierno estadounidense a su socio, representa el informe
de una agencia de las Naciones Unidas, que establece la existencia de un
régimen de apartheid israelí, que somete al pueblo palestino en los
territorios ocupados de la Ribera occidental.

La denominada Comisión Económica y Social de las Naciones Unidas Para el
Asia Occidental – ESCWA por sus siglas en inglés - es una entidad
dependiente de las Naciones Unidas cuya misión es apoyar el desarrollo
social de sus miembros. Algunos Estados que componen este grupo de 18
países árabes y de Asia Occidental, solicitó un informe sobre la
situación vivida por el pueblo palestino en los territorios ocupados,
concluyendo, en parte de su informe que “Israel ha establecido un
régimen de apartheid que somete al pueblo palestino en su conjunto”.

Apartheid Versión Sionista

El texto del informe entregado al conocimiento público, constituye un
legajo de más de 60 páginas, que reconoce la política de segregación
racial de Israel contra el pueblo palestino y concluye con un capítulo
de recomendaciones en el que pide a la ONU y a la comunidad
internacional que estudien acciones para responder a las políticas
israelíes contra los palestinos y tomen medidas contra sus responsables.
El redactor principal de este lapidario informe de condena a la política
de apartheid de Israel es el estadounidense Richard Falk, profesor
emérito de derecho internacional de la Universidad de Princeton y quien
cumplió años atrás la función de Relator Especial de las Naciones Unidas
sobre la situación de los derechos humanos en los territorios palestinos
ocupados.

El documento de la ESCWA refleja una acusación que no es inédita, que se
une a la Resolución N° 2334 del 23 de diciembre del año 2016, que exige
a Israel cesar de inmediato y en forma completa todas las actividades
de colonialismo en territorio palestino. Incluyendo en esta exigencia a
Al-Quds – Jerusalén Este – ocupados desde el año 1967 – Colonialismo que
se expresa a través de la construcción de asentamientos – 140 en el West
Bank - poblados con hombres y mujeres de religión judía traídos de
diversas partes del mundo, considerados los más extremistas dentro de la
sociedad israelí.–

El cumplimiento de las resoluciones o las conclusiones derivadas de
informes como el de la ESCWA son ignorados, permanentemente, por las
autoridades sionistas, contando para ello con el apoyo de su principal
valedor: Estados Unidos. En esta ocasión, tal como la Resolución 242 del
año 1967 o la N° 2334 del año 2016 y el medio centenar de estos
llamados, que no han sido cumplidos por Israel; este nuevo Informe de
la ESCWA será ignorado por los políticos sionistas. Teniendo además que
ser testigos de una lluvia de críticas por el padre putativo de Israel:
el gobierno estadounidense, que tiene en su primer mandatario, un adalid
en la defensa del sionismo como no lo ha tenido presidente alguno en
los últimos años y donde el lobby del Comité de Asuntos Públicos
estadounidenses-Israelí – AIPAC - genera la verdadera política exterior
de Washington.

La Secretaria Ejecutiva de la ESCWA y que además ocupa el cargo de
Subsecretaria General de la ONU, la jordana Rima Khalaf, sostuvo ante
medios de prensa que “el reporte que hemos entregado para conocimiento
de la comunidad internacional es el primero de su tipo en que clara y
honestamente concluye que Israel es una entidad racista que ha
establecido un sistema de segregación que persigue al pueblo palestino”.
El informe que vuelve a colocar al sionismo en el centro de la condena
internacional señala que el principal método usado por el régimen
ocupante de Palestina en el plano del apartheid denunciado es “la
fragmentación estratégica de los palestinos” que ha provocado la
división del pueblo palestino no sólo en dos zonas diferenciadas: la
Franja de Gaza y el West Bank, sino que también dentro de la ribera
occidental ha creado bantustanes, que impiden en forma práctica el
concretar la idea de un Estado palestino. “Se ha dividido al pueblo
palestino en dos regiones diferentes geográficamente administradas por
distintos tipos de legislación”.

No había terminado de darse a conocer el citado informe, lapidario con
la conducta segregacionista del sionismo respecto al pueblo palestino,
cuando al unísono, en coro vociferante e histérico, el régimen de Tel
Aviv y el de Washington expresaron su “indignación” por el informe. En
el caso del gobierno de Donald Trump, la cólera se expresó a través de
las palabras de la embajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley
quien sostuvo que “este informe se debería suprimir. Las Naciones Unidas
están enojadas con este informe y el Secretario General hace lo correcto
al tomar distancia de este documento pero, debería ir aún más lejos y
retirarlo lisa y llanamente", añadió la funcionaria estadounidense en
una especie de dictak imperial. Refiriéndose con ello a la declaración
del portavoz de la ONU, Stephane Dujarric, quien ante medios
periodísticos en Estado Unidos sostuvo que el reporte se publicó sin
consultas previas con el Secretario General de la ONU, el portugués
Antonio Guterres. Cuestión lógica, pues se trata de informes que las
distintas comisiones y agencias de las Naciones Unidas emiten de acuerdo
a su grado de autonomía y objetivos determinados en su misión.

Las presiones se han dejado sentir con fuerza a través de amenazas de la
entidad sionista, al mismo nivel de las efectuadas en diciembre del año
2016 donde la furia del gobierno de Netanyahu llegó al extremo de
convocar a sus embajadores desde los países que aprobaron la Resolución
N° 2334 y amenazar con sanciones. Danny Danon, un reconocido colono
israelí con estudios en Estados Unidos y que hoy cumple la función de
representante de Tel Aviv ante las Naciones Unidas – a pesar de
menospreciar públicamente al organismo internacional convencido que no
debe influir en las decisiones de la entidad sionista – señaló con
respecto al informe de la ESCWA que “estamos ante una mentira descarada,
despreciable que tiene el intento de manchar el nombre de Israel”. No es
difícil imaginarse que se hablará de retirar los fondos de mantención de
la ONU que entregan ambos países, con sanciones a organismos y agencias
de esa entidad multinacional, en fin, lo conocido cuando el criminal es
conminado a no seguir delinquiendo

En la mentalidad sionista y en la explicación – Hasbará en el lenguaje
hebrero - resulta lógico que un régimen que hace de la ocupación de las
tierras palestinas, del crimen contra su pueblo, la discriminación,
segregación, usurpación y robo de sus riquezas naturales, de la negación
del otro como ser humano, que construye muros de separación, en ese
marco resulta lógico que trate de justificarlo y niegue que su política
contra el pueblo palestino sea una política de apartheid y lo denomine
como territorios administrados y en disputa en lugar de ocupados. Que
hable de valla de seguridad en lugar de muros de separación, que
demonice a la sociedad palestina con legítimo derecho a combatir al
ocupante.

El esfuerzo sionista va cada día encaminado a fortalecer tácticas de
deshumanización de la población palestina mediante la retórica del
terrorismo, tildándolos de una sociedad que no quiere la paz. Es en
función de estos esfuerzos propagandísticos que la Universidad de Haifa,
por ejemplo, ha comenzado a ofrecer desde el año 2014 a la fecha curso
de ciberguerra para combatir lo que ellos llaman la “deslegitimización
de Israel en internet”. Práctica que se une al trabajo de coordinación y
otras iniciativas de Hasbará como la Universidad hebrea, la Universidad
Ben Gurion o entidades más de choque destinadas al público de habla
castellana como Hatzad Hasheni.

Desde el año 2001 el régimen israelí ofrece a universitarios de Estados
Unidos “Becas Hasbará” destinadas a ofrecer educación proisraelí para
que esos pasantes puedan combatir lo que llaman propaganda anti israelí
en los campus de estudio estadounidenses” tal como lo sostiene el
estudiante Zach Sandler de la Universidad de Illinios que afirma “Las
Becas Hasbará me proporcionaron la capacidad estratégica para ser un
líder pro-Israel eficaz en mi campus siempre volátil".

El Informe de la ESCWA Legitima la Campaña BDS

Pero…no se puede tapar el solo con un dedo y seguir negando aquello que
ya es evidente para la humanidad en su conjunto, con excepción del
gobierno de Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y algún otro diletante
solitario, con la pesada mochila del lobby sionista sobre sus espaldas:
Israel es una Entidad que practica un sistema de segregación racial y
eso se llama Apartheid, tal como lo señala en su informe la Comisión
Económica y Social de las Naciones Unidas Para el Asia Occidental –
ESCWA -

Hasta en la propia entidad sionista, algunos medios de comunicación,
centros especializados de investigación y ONGs defensoras de los
derechos humanos – muy minoritarios aún - dan cuenta de la mala imagen
de Israel ante el mundo, por más trabajo de limpieza de imagen que se
haga. Por ejemplo, el Think Tank Reut Institute resume el cómo es
visualizado Israel en el mundo: un régimen “que no está interesado en la
paz, sino que en perpetuar la ocupación de los territorios palestinos.
Se le identifica con el régimen del apartheid en Sudáfrica. Se le acusa
de discriminar a la población palestina y de violar sus derechos humanos
sistemáticamente. Se intenta aplicar las leyes internacionales contra
sus dirigentes. Su sistema legal es denunciado por falta de legitimidad.
El trato a los ciudadanos árabe-israelíes es objeto de análisis y
críticas internacionales”

El reconocer que la entidad sionista practica un sistema de segregación
racial – apartheid – legitima toda la campaña internacional de Boicot,
Desinversión y Sanciones – BDS – contra el colonialismo, el apartheid y
la ocupación israelí. Y eso, el gobierno sionista sabe que son palabras
mayores, ya dimensionadas en daño económico, imagen política y
desinversión que según cálculos de las propias autoridades ocupantes ha
significado pérdidas por 35 mil millones de dólares desde que se dio
inicio a la campaña el año 2005, desde la propia sociedad civil
palestina y que ha prendido en gran parte del mundo.

Perjuicios que ha significado el análisis político-militar sionista, con
llamados a eliminar físicamente a los promotores de la campaña BDS. Tal
como aconteció en marzo del año 2016 en la ciudad ocupada de Al-Quds –
Jerusalén – donde una gran número de responsables políticos, militares y
periodistas israelíes participó en una conferencia denominada “Stop
BDS”. Ocasión en la cual, Yisrael Katz, ministro de inteligencia del
régimen de Israel, pidió realizar "asesinatos selectivos" de activistas
que apoyan el movimiento BDS con la ayuda de la inteligencia del régimen
de Tel Aviv” ¡ejemplar llamado desde la “mayor democracia de Oriente
Medio” con que suelen vanagloriarse los sionistas, que sacan a relucir
sus demonios cuando se ven acorralados al revelarse sus crímenes y
políticas de segregación.

Para los promotores del BDS el informe de la ESCWA refleja el hecho que
ha sido la primera entidad de la ONU que prueba, sin lugar a dudas, que
Israel es culpable del crimen de apartheid contra el pueblo palestino.
Esto confirma las conclusiones del movimiento BDS desde el año 2005
cuando se da inicio a esta lucha. Dado que el apartheid es el segundo
crimen más grave contra la humanidad en el derecho internacional –
Después del delito de genocidio – esta demoledora conclusión de esta
comisión de la ONU reforzará el argumento a favor de las sanciones
mundiales contra Israel, que tuvo el año 2015 un fuerte apoyo por parte
del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas que aprobó en
Ginebra, Suiza, la confección de una lista negra de las compañías
israelíes e internacionales que operan directa o indirectamente en los
asentamientos ilegales israelíes den la Ribera Occidental, Al-Quds –
Jerusalén - y en el Golán, territorio usurpado al pueblo sirio desde la
Guerra del año 1967.

Para Omar Omar Barghouti, cofundador del movimiento BDS el nuevo
informe de la ONU refleja que el apartheid sionista está destinado a
terminar más temprano que tarde “tal como se hizo con Sudáfrica.. BDS no
sólo está creciendo de manera impresionante en los campus, en iglesias,
sindicatos, organizaciones culturales y movimientos sociales, hoy es
adoptado por una Comisión de la ONU. Este bien puede ser el primer rayo
de luz que abra el alba de las sanciones contra el régimen de ocupación,
colonialismo y apartheid de Israel”

Y, sin duda, esto será así, a pesar de la contumacia criminal de la
alianza entre Benyamin Netanyahu y Donald Trump, decididos a legitimar
la ampliación inmoral, ilegítima y criminal de las colonias sionistas en
territorio palestino con toda su carga de segregación y violación de los
derechos humanos de la población palestina ocupada. Sionismo como
ideología y Apartheid como práctica de ocupación se constituyen así en
dos palabras para un mismo significado: crímenes de lesa humanidad.


Artículo de Pablo Jofré Leal