Luque, Juan Pablo; Soto Mario Alberto; Vargas, Juan Carlos; Rey, Carlos Marcelo;
Espinosa, Néstor Darío; Gaspar, José Eduardo; Martínez, Pablo Alejandro:
Por la presente hago público mi más profundo y enérgico repudio a su proyecto de regular la violencia más antigua que sufrimos las mujeres, las niñas y niños: la prostitución.
Le pregunto Sr. intendente y Sras. y Sres. legisladoras/es ¿Saben lo que es la prostitución? ¿Saben lo que es una puta? ¿Saben lo que es un torturador- prostituyente? ¿Saben lo que se siente cuando se es traficada para ser puta?
Como mujer víctima y sobreviviente del campo de concentración que es la prostitución solo les diré un par de cosas: la prostitución no es un trabajo, es la violación de los derechos económicos, sociales, culturales, políticos y civiles.
Y esta no es solo una frase bonita, es una realidad violenta. Todos los sistemas y gobiernos como el suyo, que promueven el turismo desde la explotación y violación de miles de mujeres, promueven la pobreza y la vulnerabilidad y de esta manera se convierten en gobiernos-estados proxenetas, que viven de la explotación ajena. Por eso hoy el tráfico de personas para la explotación sexual es el segundo delito mundial.
El proyecto de regular esta violencia hacia nosotras las mujeres niñas-os, en especial pobres, para divertimento de los varones que vivan y/o trabajan en Comodoro Rivadavia es promover el proxenetismo y el tráfico de personas para la explotación sexual.
Para decirlo claro y fuerte: regular la prostitución es promover lo que es un delito en nuestro país y ustedes son cómplices de ello.
Cuando nos convierten a las mujeres en las putas de todos y todas, dejamos de ser sujetas de derechos para comenzar una vida violenta y cosificada.
Cuando a las mujeres nos convierten en las putas de todos y todas, nuestro cuerpo no nos pertenece, el torturador-prostituyente se lo alquila al fiolo o fiola, al y a la traficante de personas, o en este caso a la intendencia.
Cuando a las mujeres nos convierten en las putas de todos y todas ya no tenemos voz propia. Y las pocas mujeres que pudimos decir basta, sabemos que el silencio en la prostitución es vida.
Cuando a las mujeres nos convierten en las putas de todos y todas no tenemos decisión propia. En este campo de concentración una decisión siempre es coaccionada.
Los varones que van de putas se convierten en nuestros torturadores diarios, porque en la prostitución no existe las caricias, están sólo los manoseos. Los varones que van de putas no compran un servicio, pues las putas no somos un kiosco, un banco, un supermercado; no vendemos nada porque nada nos pertenece. Los varones que van de putas no compran sexo, practican la violencia como sexo.
Por ello Sr intendente: Néstor José Di Pierro ¿Por qué no promueve e incentiva a los varones de Comodoro Rivadavia a vivir una sexualidad no violenta?
Sr. intendente, Sras. y Sres. concejales: Argentina es un país abolicionista, por lo tanto ustedes deben trabajar en políticas públicas que erradiquen la prostitución.
Ustedes deben trabajar para promover:
La cultura del trabajo.
Un salario digno.
educación, salud y vivienda digna
Una sociedad no violenta hacia las mujeres, niñas y niños.