Hace unos días, la empresa de calzados Manaco de Cochabamba
(dependiente de la transnacional Bata) decidió despedir
injustificadamente al trabajador Alejandro Saravia. El sindicato de la
fábrica, como viene haciendo hace algunos años, no hizo nada por
Saravia y defendió a sus patrones. Pero otro trabajador surgido en
esos talleres, en ese sindicato, decidió apoyarlo: Oscar Olivera, como
Secretario General de la Federación de Trabajadores Fabriles de
Cochabamba, ha lanzado desde el pasado 30 de junio una huelga de
hambre como protesta contra las políticas laborales de Manaco.
Sin lograr hasta ahora la reinstalación de Alejandro Saravia, el
famoso portavoz de la Coordinadora del Agua y dirigente social
boliviano ha conseguido ya el apoyo efectivo de la Confederación de
Trabajadores Fabriles de Bolivia y de otros líderes obreros de
Cochabamba. Varios dirigentes se encuentran ahora mismo en huelga
junto a Oscar en la sede de los fabriles cochabambinos:
http://www.ukhampachabolivia.org
Además de la defensa de sus derechos y conquistas, injusta e
ilegalmente retirados por la empresa Manaco a los trabajadores, los
dirigentes fabriles han llamado a un ampliado para resolver más
medidas de presión y exigieron del actual ministro de trabajo, Walter
Delgadillo, una acción concreta al respecto. Pero ni de los medios
comerciales ni del gobierno "del cambio" hubo respuesta concreta hasta
este momento.
De todos modos, UB ha seguido de cerca la huelga y nuestros
colaboradores ya han escrito un par de reportes al respecto. Hoy,
cuando fue evidente que ante demandas y razones la empresa Manaco
hacía oídos sordos, Oscar y los demás compañeros decidieron
radicalizar y ampliar su protesta, advirtiendo a los patrones que
habrán de "hacerse escuchar de otras maneras".
http://www.ubnoticias.org
No se pierdan la cobertura que haremos de esta nueva lucha emprendida
por Oscar Olivera y sus compañeros fabriles. En los próximos días
publicaremos más informaciones, tanto en las páginas de UB como en las
de UBtv. Y mientras, no olviden visitarnos de vez en cuando: siempre
algo pasa en Bolivia, pero también en Ecuador, en México y en los
demás rincones de este continente.
